Haga que el carnicero recorte la mayor cantidad de grasa posible del cordero. Esto ayudará a mantener la masa crujiente.
Porciones: 4
Ingredientes
Lista de verificación de ingredientes 1 chalota mediana, pelada, picada gruesa
- 4 dientes de ajo, pelados
- 2 cucharaditas de mostaza Dijon
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- 1 1/2 tazas de hojas de menta fresca (sin tallos)
- Sal y pimienta negra recién molida
- 1 chuletas de cordero de costilla de medio estante, (aproximadamente 1 3/4 libras)
- Paso 2 Calienta una sartén de hierro fundido lo suficientemente grande como para acomodar la media rejilla de costillas, a fuego medio-alto. Agregue la cucharada restante de aceite de oliva. Sazone el cordero con sal y pimienta y colóquelo en la sartén con la grasa hacia abajo. Dorar la carne por ambos lados hasta que esté bien dorada, de 4 a 5 minutos. Retire la sartén del fuego y transfiera el cordero a una superficie limpia.
- Paso 3 Extienda la pasta de menta reservada en el lado carnoso del cordero, y coloque el cordero en una bandeja para hornear poco profunda. Transfiera al horno y ase hasta que el cordero esté medio raro, o hasta que la temperatura interna sea de 130 grados. 18 a 22 minutos. Retirar del horno y colocar el cordero en una tabla de cortar; deje reposar de 5 a 10 minutos antes de cortar. Cortar entre los huesos y servir.
Direcciones
Instrucciones Lista de verificación Paso 1
Precaliente el horno a 475 grados. En el tazón de un procesador de alimentos, combine la chalota, el ajo, la mostaza, 3 cucharadas de aceite de oliva y la menta; Condimentar con sal y pimienta. Pulse hasta que se forme una pasta de textura media, aproximadamente 30 segundos; dejar de lado.